Es mostren els missatges amb l'etiqueta de comentaris entrevista. Mostrar tots els missatges
Es mostren els missatges amb l'etiqueta de comentaris entrevista. Mostrar tots els missatges

dilluns, 30 de juliol del 2018

Javier Santaolalla: «Quiero normalizar la ciencia y que hablar de física cuántica sea algo común entre los jóvenes»


«El mundo se divide entre los que no saben quién es el Rubius y los que no entienden que haya gente que no lo sepa. Uno de mis objetivos es traducir el castellano al millennial y el millennial al castellano, porque los millennials nos van a pagar las pensiones y estamos condenados a entendernos con ellos». Así empezaba su charla Javier Santaolalla, divulgador científico y youtuber, que el pasado 19 de julio estuvo en el Encuentro de Divulgadores organizado anualmente por la UCC+i de la Universidad de Barcelona con el apoyo de la FECYT. Durante casi dos horas, explicó su experiencia como youtuber científico, desveló todos los secretos de Youtube y sugirió consejos para aprovechar al máximo esta plataforma como herramienta de divulgación científica.


Santaolalla nació en Burgos en 1982 y estudió Ingeniería Superior de Telecomunicaciones en la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria. Es licenciado en Física por la Universidad Complutense de Madrid (UCM), y tiene un máster en Física Fundamental (UCM) y un doctorado en Física de Partículas (UCM). Ha sido investigador en el Centro Nacional de Estudios Espaciales de Francia (proyecto Galileo), ha ganado una beca predoctoral del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT) para investigar en el CERN (experimento CMS) y ha hecho un posdoctorado en la Universidad del Estado de Río de Janeiro, conjuntamente con el CERN.

Con la vocación de hacer llegar todo su conocimiento científico a un público no especializado, en 2015 puso en marcha el canal de Youtube Date un Voltio, luego creó Date un Vlog, y muy recientemente ha abierto el canal Date un Mi. Sus vídeos, que acumulan 30 millones de visualizaciones a pesar de tratar temas muy densos —los agujeros negros o la materia y la antimateria— son enérgicos y contienen grandes dosis de humor. Antes, Santaolalla ya era fundador y miembro activo del proyecto de monólogos científicos The Big Van Theory y había escrito su primer libro: El bosón de Higgs no te va a hacer la cama. Después, ha publicado dos más: Cómo explicar física cuántica con un gato zombi e Inteligencia física.



Aprovechamos su paso por la universidad para que nos explique en qué momento decide colgar la bata blanca, salir del laboratorio y dedicarse a la divulgación.

¿Cómo era Javier Santaolalla de niño?
De hecho, no era el típico niño friki que lee libros y está parado. Era hiperactivo y tenía muchísima energía. Quizás esta curiosidad por la ciencia estaba ahí, pero más apagada. Lo cierto es que las matemáticas y la física me fluían de una forma especial en comparación con otras materias y me gustaba operar con ellas, me resultaba fácil. Por eso tenía claro que me quería dedicar a la rama científica más pura.

Te matriculas en Ingeniería Superior de Telecomunicaciones, pero te acabas doctorando en Física.
Hago bien primero y segundo, y es en tercero cuando empiezo a darme cuenta de que la ingeniería no me convence. Descubro a Hawking, leo cosas de cosmología, de relatividad y de física de partículas, y es ahí cuando descubro que eso es lo que de verdad me gusta. El gran impulso nace entonces, a los veintiún años, y me matriculo en Física en la UNED, continúo la ingeniería y, de ahí, voy directo al doctorado. Yo quería ser investigador. Porque a mí lo que me gusta es aprender y una de las cosas buenas de la investigación es que todos los días aprendes algo nuevo, y eso a mí me vuelve loco.

¿Pero en qué momento dejas el CERN y te lanzas a hacer monólogos, escribir libros y crear vídeos para Youtube?
De hecho, a mí siempre me ha gustado contar las cosas que aprendo. Me fascina aprender una cosa y contarla. Soy muy intenso y además soy muy impresionable. Cuando estaba en la universidad, al llegar a casa, compartía lo que había aprendido. Emocionado, se lo contaba a mi madre. En ese momento, ya estaba divulgando, pero a pequeña escala. Con los años de estudio me fui volviendo introvertido y cuando terminé el doctorado había desarrollado una personalidad muy cerrada en sí misma. Me relacionaba únicamente con mis partículas y con otros investigadores, pero eso no me satisfacía. Entonces empecé a hacer las visitas guiadas al CERN y descubrí que establecía una conexión muy especial con aquellas personas. Alguien me había llegado a decir: «Me has cambiado la vida», y eso es muy gratificante y también muy adictivo. Después vinieron los monólogos científicos, luego mi primer libro y, finalmente, Youtube, que es el centro de control neurálgico de todas las operaciones de los millennials.

La apuesta por los libros, en un mundo eminentemente digital, tiene mérito. ¿A quién van dirigidos?
Mis libros van dirigidos al Javier de diecisiete años. A mí me hubiera gustado encontrar a alguien que me contara cosas impactantes con un lenguaje ameno y cercano. El objetivo es contar lo más atractivo de la ciencia, rebajando el lenguaje, poniendo muchísimo humor y utilizando analogías que sirven para entender mejor los conceptos.



En Youtube estás teniendo un éxito extraordinario: tus canales ya acumulan 30 millones de visitas. ¿Te quitan el sueño las audiencias?
Existe el runrún de si dejará de verme la gente porque, a pesar de no estar mirando las audiencias todo el tiempo, soy consciente de que mi éxito depende de que a la gente le guste lo que hago. Ese miedo está ahí. No te puedes acomodar. Hay que renovarse y plantearse siempre nuevos retos. Quiero dar lo mejor de mí mismo y soy muy perfeccionista. Por ejemplo, me funcionó muy bien hablar de Stephen Hawking al principio, pero ahora cada vez que digo la palabra Hawking pierdo un seguidor. Es normal, la gente quiere algo nuevo siempre.

Mayoritariamente, el público de tus canales es gente muy joven, de entre catorce y veintitrés años, así que tienes el poder de fomentar vocaciones científicas.
Totalmente. Me encantaría que la juventud, poco a poco, tome la ciencia como una parte de sus vidas, y del mismo modo que es ridículo no saber cuál es la capital de Francia, sea igual de ridículo no saber quién hizo la teoría de la relatividad general y en qué consistió. Quiero normalizar la ciencia, que hablar de física cuántica sea común entre la juventud. Yo aspiro a que me vea quien ve al Rubius cuando se canse del contenido vacío del Rubius y quiera profundizar en algo. Porque me gustaría transformar la sociedad y llevar la ciencia a las calles. En ese sentido, para llegar a un público que quiere entretenimiento, he creado un tercer canal: Date un Mi, donde hago entretenimiento científico, hablo de cosas más mundanas, pero cuelo la ciencia.

dilluns, 28 d’agost del 2017

RICARD BELIS: «Una de les essències de la democràcia és que la població estigui ben informada»


Foto: J M Rué

Ricard Belis i Garcia va néixer a Barcelona el 1964 i va estudiar Ciències de la Informació a la UAB. Va entrar a formar part de la plantilla de TV3 molt jove i ha dedicat la seva carrera professional al documental. Gràcies a aquest gènere, ha pogut destapar qüestions que s’han intentat mantenir ocultes, denunciar injustícies i reivindicar el ciutadà anònim. Perquè Belis concep el documental com una palanca per canviar el món, per donar veu a les persones que normalment no en tenen i molestar els poders explicant coses que s’han volgut amagar.

Al llarg de la seva trajectòria, ha rebut nombrosos guardons, com ara el Premi Unda del Festival de Televisió de Montecarlo (1999), el Premi Nacional de Periodisme de la Generalitat de Catalunya (2002), el Premi LiberPress (2004), la Medalla de Bronze del New York Festival (2006) i el Premi Tiflos de l'ONCE (2017), entre d'altres.

Fa temps que tinc ganes d’entrevistar-lo, i aprofito el fet que Belis compagini la seva feina a TV3 amb les classes al grau de Comunicació Audiovisual de la Facultat de Biblioteconomia i Documentació de la Universitat de Barcelona, per demanar-li, en tant que redactora del Gabinet de Premsa de la UB, que em regali una estona del seu temps. Li explico que l’entrevista es publicarà al web institucional de la Universitat i, si em dona permís –que ho fa–, també aquí al blog.

Ens citem a la Facultat, jo jugo amb avantatge, perquè sé quin aspecte té. Ell ve directe cap a mi, deu ser que faig cara de periodista. Seiem en una cafeteria, poso la gravadora en marxa i pregunto sense fi tot el que vull saber.

Quan et vas matricular a Ciències de la Informació, sabies que et dedicaries als documentals?
Crec que no. Vaig començar Periodisme perquè m’agradava escriure, i això sí que ho tenia clar des de força jove. Però un cop a la Facultat, em va cridar molt l’atenció el món audiovisual. I en el moment de demanar les pràctiques a quart o cinquè no vaig tenir cap dubte que la meva primera opció era TV3. Era un somni. En aquell moment, el model de TV3 era capdavanter i modern, i vaig tenir la sort que em van agafar.

Foto: J M Rué

I el 1991, molt jove, entres a formar part de l’equip de 30 minuts.
Sí. Abans feia d’ajudant de realització dels telenotícies i, quan va arribar l’estiu, vaig passar a realitzador. Aleshores, en acabar el primer TN com a realitzador, em va trucar el director del 30 minuts. Vaig pensar: «Ricard, ja has fet alguna cosa malament i et caurà una bronca...». I resulta que no, que era per preguntar-me si volia entrar com a ajudant al 30 minuts. «No faràs reportatges», em va dir (aleshores hi havia molta feina de fer tràilers, sumaris, doblatges de programes comprats, etc). Però al cap d’un any ja estava fent reportatges (riu).

I del 30 minuts, després de molts anys, passes al Sense ficció.
Sí. El que passava amb el 30 minuts és que no era pròpiament un programa de documentals sinó de reportatges, tot i que ha acabat encabint formats que no ho són, com Els nens perduts del franquisme. I no és fins fa nou anys, sota la direcció de Mònica Terribas, que es pren la consciència que cal una finestra de documentals. Així neix aquest miracle que es diu Sense ficció, que és l’únic programa de documentals que s’emet en prime time en una primera cadena de televisió del sud d’Europa, competint amb programes com MasterChef o Supervivientes, i aconseguint grans audiències. Hem d’agrair a TV3 que sempre hi hagi apostat, perquè ha acabat formant el públic català i acostumant-lo a veure aquest format.

A veure'l i a gaudir-ne, tot i la cruesa d’algun dels temes que s’hi tracten.

Efectivament, són temes que no acostumen a ser agradables o que, si més no, et fan posar de mal humor.

Perquè el que fas és, precisament, destapar qüestions que s’han intentat mantenir ocultes, visibilitzar negligències, denunciar injustícies i, en definitiva, despertar consciències.
Sí, perquè aquesta és precisament l’essència del periodisme, encara que hi hagi gent en aquest país que sembla que se n’hagi oblidat. Per mi un documental és una palanca per canviar el món. I per fer-ho, cal donar veu a les persones que normalment no en tenen i molestar els poders destapant coses que s’han intentat amagar.

No és fàcil, suposo.
No. No és fàcil. La principal dificultat amb què et trobes és la manca de recursos, perquè per fer tot això que et dic, cal temps. El mitjà en el qual estàs ha de poder i voler invertir, sobretot temps, en una investigació.

Si més no, si es vol fer amb rigor.
Exacte. Per posar un exemple, a Els internats de la por recollim el testimoni davant de càmera d’una dotzena de casos, però nosaltres vam construir una base de dades de vora dos-cents. Per què? Doncs perquè sovint no tens proves físiques i has de recórrer al testimoni. I aquest pot mentir, pot tenir la memòria alterada, o pot no voler parlar. Però d’alguna manera, quan trobes testimonis que no es coneixen entre si, que són de diferents llocs de l’Estat i que expliquen històries que són coincidents, allò adquireix un poder probatori. En historiografia es diu que si hi ha tres testimonis que corroboren el mateix sense que es coneguin entre ells, aquesta prova és tan vàlida com un document de paper.

Foto: J M Rué

En relació amb els testimonis, basant-te en la teva experiència, diries que les persones tenen ganes de parlar?
Hi ha de tot. Hi ha molts testimonis que veuen en el teu treball una possibilitat de reparació. Per exemple, en el cas que dèiem dels internats, poden veure-hi la reparació que no ha fet mai l’Estat o l’Església demanant perdó. En el cas del franquisme, el dolor més gran no és només el que els va infligir la mateixa repressió —l’afusellament del marit, el robatori del nen, els maltractaments, etc.—, sinó el fet que amb l’arribada de la democràcia ells esperaven que els demanarien perdó i, en canvi, aquesta democràcia ha callat. Hi ha un dolor intern molt fort i per a alguns d’ells nosaltres ens convertim en una eina de reparació del que va passar. I de la mateixa manera, molt legítimament, hi ha gent que prefereix no explicar-ho. Són coses molt íntimes, de vegades no ho han explicat ni a la seva dona i no ho faran davant la càmera. L’altra cosa és que, des del moment en què surt en un mitjà de comunicació tan gran i amb un abast d’audiència tan elevat, moltes persones que no han tingut cap contacte amb el documental se senten també reivindicades perquè veuen que estàs explicant la seva història. Veuen que no només els va passar a ells, que no és que van tenir mala sort, sinó que és una cosa que passava de manera força generalitzada.

Hi ha moments més propicis que d’altres per aconseguir que les persones trenquin el silenci?
Sí. Moltes vegades es tracta de trobar el moment. Un exemple molt clar és el del documental Jo també vull sexe!, sobre la figura de l’assistent sexual per a persones amb discapacitat, que és un tema difícil i molt tabú. El vam intentar abordar fa tres anys però no va ser possible, perquè era massa incipient: tot just es començava a parlar d’aquest tema, però no estava normalitzat.

I quan decideixes tornar-hi, tres anys després, ja està normalitzat?
No, no del tot. Però en aquest segon intent vam arribar en el moment de la conjunció astral perfecta, que de vegades és pura màgia, no saps ben bé per què succeeix, però tot i que el tema no estava normalitzat ni era conegut per l’opinió pública, la gent que hi estava involucrada havia decidit sortir de l’armari i volia fer-ho. Tenien moltes ganes de parlar. I tot i que a priori crèiem que seria un documental d’aquells difícils de fer, amb cares tapades o pixelades, resulta que va ser tot al contrari.

I la resposta de l’espectador, quina va ser?
Amb Jo també vull sexe! ens va passar una cosa molt curiosa. Tot i que va anar molt bé d’audiència —va ser el quart programa més vist d’aquell dia i líder en la seva franja—, la resposta no va ser desbordant. Em pensava que encara aniria millor. Per mi, aquest era un documental bonic, d’amor. En canvi, per molta gent —abans de veure’l— era un documental de morbo, d’«ai, vols dir?». Hi havia un rebuig previ important. De vegades, l’espectador no rep el documental com tu el perceps. Abans d’emetre’l, em vaig passar molt temps intentant convèncer amics i coneguts que era un tema bonic, i no s’ho creien. La gent no volia veure aquells cossos, perquè els feia angúnia. Una altra cosa curiosa és que aquest és, de llarg, el documental que ha funcionat millor per Internet: 100.000 descàrregues.

Després de l’emissió dels documentals reps moltes trucades?
En el cas de Pastilla busca malaltia hi va haver unes quantes cartes al director. A Què mengem?, sobre els tòxics alimentaris, hi va haver reaccions de tota mena: la Secció de Química de l’Institut d'Estudis Catalans i un diputat d’ERC de les terres de Lleida —perquè allà fan molta agricultura amb pesticides— van fer una pregunta al Parlament en la sessió de control del director de TV3. Ens van titllar de criminalitzar l’agricultura no ecològica i de més coses. Però fins ara no hi ha hagut més conseqüències que això: una carta, una pregunta al Parlament, missatges al Facebook i al blog del programa, etc. Forma part de la funció d’un documental: que remogui, que sigui polèmic. Ha de generar comentaris, elogiosos o no, la qüestió és que se’n parli. Si el Twitter està mort durant l’emissió, vol dir que estàs fallant en alguna cosa. Has de provocar reaccions.

Els teus caps t’han aconsellat alguna vegada que deixis estar un tema per por de represàlies?
És més subtil. Normalment, l’argument que et donen per no fer un tema no és aquest. Et diuen: «Vols dir que això interessarà l’audiència?», «aquest és molt difícil», o bé «aquest fem-lo, però ves amb compte», que és, per exemple, el que va passar amb el de les empreses elèctriques, Revolució solar.

Com va funcionar Revolució solar?
Hi havia certa preocupació i, en canvi, va funcionar molt bé. Ens amoïnava perquè, d’una banda, és un tema poc televisiu: les plaques solars no es mouen ni són gaire simpàtiques; i de l’altra, perquè és una qüestió complexa d’explicar: la factura de la llum, com funciona el sistema elèctric espanyol, etc. Segurament no guanyarà cap premi ni ens ho vam passar tan bé fent-lo com amb Jo també vull sexe!, perquè no és tan espectacular, però trobo que és un documental de servei públic absolutament necessari i amb el qual vam aconseguir explicar a la gent que, tot i ser el país que té més sol d’Europa, el fem servir només per posar-nos morenos en comptes d’utilitzar aquesta energia solar per fer electricitat. I aquest és l’inici del canvi. Una de les essències de la democràcia és que la població estigui ben informada. Si no, no pot escollir bé els seus dirigents, no pot triar bé com a consumidor. Un dels problemes greus de la democràcia espanyola és que tenim un sobreaccés a la informació, però es tracta d’informació de molt baixa qualitat i molt superficial. Cada cop preval més la immediatesa, ser el primer, i això vol dir contrastar menys, perquè no hi ha temps. Els grans mitjans han renunciat, majoritàriament, a fer periodisme en profunditat. I la gent no és conscient de com de perillós és això per a la societat.

Foto: J M Rué

De quin documental guardes un record més especial?

Si n’he de triar un que hagi marcat la meva vida, és Els nens perduts del franquisme, sens dubte. Hi ha un abans i un després de l’emissió d’aquest treball. Va posar en la primera línia d’aquest país el concepte de memòria històrica, que fins aleshores era força desconegut. I l’èxit brutal d’aquest documental ens permet obrir, amb la Montse Armengou —amb qui he fet molts d’aquests documentals—, una línia de recerca que no hauríem pogut encetar d’una altra manera. La meva carrera no s’entendria sense Els nens perduts del franquisme. Si parlem d’estimació, a Jo també vull sexe! li tinc molt d’afecte. És molt diferent dels que fem habitualment, i significava parlar d’amor. Fent-lo hi va haver molt bon rotllo i ens ho vam passar molt bé. I si he de triar el documental que més m’agrada com ha quedat i el que més feina té al darrere, la cosa estaria entre Els internats de la por i Avi, et trauré d’aquí. El segon, a més, va ser votat pels espectadors com a millor documental dels primers cinc anys de Sense ficció, i aquest és sempre el millor premi que pots rebre.

Quin és el missatge principal que fas arribar als seus alumnes de Comunicació Audiovisual?
L’amor per l’heroi anònim, la importància de rescatar les veus anònimes i explicar les petites històries. Els recomano que donin menys importància al polític i al dirigent, que sembla que és on avui en dia es posen tots els focus i totes les càmeres. Els explico que cal rescatar el ciutadà anònim i reivindicar-lo, buscar aquestes històries i visibilitzar-les. I una altra cosa molt important que explico als alumnes —que queden molt parats— és que nosaltres anem a rodar sense guió. Perquè has d’estar obert que passin coses o que te n’expliquin d’altres que no preveies, i això no és una desgràcia, sinó que és una sort.



dimarts, 26 de febrer del 2013

EMILIO GUTIÉRREZ CABA: «ELS DIRIGENTS ACTUALS TENEN MOLT POCA CULTURA I UNA INTEL·LIGÈNCIA MOLT PERVERSA»

Foto: Josep Maria Rué


L’Emilio Gutiérrez Caba desprèn, sobretot, un absolut respecte per la professió. Estima la interpretació com a la pròpia vida i es nota. Abans d’entrevistar-lo, assisteixo a una conferència que imparteix a la Facultat de Geografia i Història de la Universitat de Barcelona davant d’un centenar de nois i noies nascuts als anys 90 i que, probablement, dels més de 50 anys de la seva carrera, només en coneixen el seu paper protagonista a la sèrie televisiva «Gran Reserva».

El seu tarannà àgil i divertit fa que de seguida es posi l’auditori a la butxaca. Parla amb passió de la seva experiència damunt dels escenaris, explica amb gràcia les anècdotes viscudes durant alguns rodatges cinematogràfics i critica sense embuts el tipus de ficció que s’emet a la televisió, sovint, «buida de contingut».

Li dol que la cultura estigui tan devaluada, es queixa que el cinema espanyol no hagi sabut aprofitar com cal els seus intèrprets teatrals i es lamenta que ja hagin desaparegut els autèntics «monstres del cinema» com Ava Gadner. És un home senzill, que toca de peus a terra i es fàcil d’imaginar assegut al sofà del menjador de casa seva amb un bon llibre i poca cosa més. No en va, diu: «jo no em puc desvincular del croissant que prenc a l’esmorzar, com tampoc no puc fer-ho de la situació que viu actualment el país».

Va néixer a Valladolid l'any 1942, i pertany a una família d’actors, per la qual cosa la seva infància i adolescència van transcórrer en un ambient artístic. Va estudiar teatre a l’Institut San Isidro de Madrid i va formar part del grup escènic d’aquesta institució. L’estiu del 1962 es va incorporar a la companyia de Lili Murati, amb què va fer la primera gira teatral per Espanya.

El 1968 va crear la seva pròpia companyia, juntament amb María José Goyanes, i el 1970 va estrenar una obra de l’escriptora Ana Diosdado, titulada Olvida los tambores, amb la companyia de la seva germana Julia. D’ençà del 1979 ha estrenat obres d’autors clàssics com ara Gil Vicente, Calderón, Shakespeare, Joyce o Juan Ruiz de Alarcón, i no ha deixat d’intervenir en peces d’autors contemporanis, per exemple, Álvaro del Amo, Jorge Díaz, Fermín Cabal o Juan García Larrondo. El 1996, va interpretar el personatge de Don Diego a El sí de las niñas, de Moratín, i el 1998 va estrenar una obra que va recórrer tot Espanya durant gairebé quatre temporades: La mujer de negro. El 2003, va estrenar al teatre El príncipe y la corista, acompanyat per María Adánez, i el 2008, l’obra La muerte y la doncella, amb Luisa Martín. 

El 1963, va debutar a la gran pantalla i, des de llavors, ha participat en més de vuitanta pel·lícules. El seu primer paper important va ser a Nueve cartas a Berta (1966), de Basilio Martín Patino, i ha destacat en altres pel·lícules com ara La caza (1965), de Carlos Saura. El 2001, va guanyar el Goya al millor actor de repartiment per La comunidad, d’Álex de la Iglesia (aquella mateixa nit la seva germana Julia rebia l’estatueta de millor actriu de repartiment), i va repetir el 2002 en la mateixa categoria per El cielo abierto, de Miguel Albaladejo. El 2007, va rebre una nominació per La torre de Suso, de Tom Fernández. Actualment, protagonitza la sèrie de televisió Gran reserva.

Foto: Josep Maria Rué


- Vostè, que és fill i nét d’actors, porta el teatre als gens. Creu que s’hauria pogut dedicat a cap altre ofici? S’ho va arribar a plantejar mai?
Pensava dedicar-me a una altra cosa. De fet, no ho vaig tenir clar fins als divuit o dinou anys. Abans de dedicar-me a la interpretació, vaig estar en un laboratori de cinema i, més tard, el 1962 ―ja fa 50 anys―, vaig trepitjar un escenari per primera vegada. Però al principi, ni la meva germana Clara ni jo teníem gens clar si ens havíem de dedicar al teatre.

- Suposa una gran responsabilitat pertànyer a una saga tan vinculada al món de la interpretació?
En realitat, en aquella època no ens ho plantejàvem. Als anys seixanta, pensava que era una professió artesanal que m’havia de servir per viure; no em plantejava fins on podia arribar, sinó simplement si podia exercir-la i viure mínimament fent d’actor.

La meva família, tant el pare com la mare, eren molt bons actors. La mare era una actriu molt característica. No guanyaven molts diners, però sí que vivien còmodament perquè treballaven cada dia (parar un mes suposava per a ells un problema greu). Vam créixer sabent que aquesta professió era molt dura. Quan vaig començar a treballar, sí que em van dir diverses vegades que les meves germanes havien deixat el llistó molt alt. Jo sempre deia que elles eren dones que havien fet una carrera com a actrius, i que jo era una altra cosa, era un actor d’una altra generació, i podia fer el que em vingués de gust.

Les meves germanes i jo vam tenir la sort de poder començar a treballar també a la televisió i al cinema. Ja ens hauria agradat que els pares ho haguessin pogut fer! Quan tinc algun problema econòmic, alguna dificultat, sempre penso que si la meva mare aparegués per aquí em clavaria una bufetada (riu).

- Pràcticament tots els actors tenen debilitat pel teatre, però és justament en l’escenari on un actor es pot sentir més indefens (no es pot repetir en cas d’equivocar-se, el públic és al davant...). És la gratificació del públic el que més els sedueix?
Crec que el que li passa al teatre, almenys en el meu cas, és que la representació cada dia és la mateixa però alhora és molt diferent. Per tant, el que fas cada dia és irrepetible. Hi ha dies que penses que l’actuació anterior va ser el súmmum, però pot passar que siguis capaç d’anar més enllà... És un repte diari, una recerca i un joc constant amb el públic, que assisteix a un procés únic, efímer i irrepetible. I en el cinema i la televisió això és impossible perquè formes part d’un equip molt gran i no tens tant control. El teatre és molt més petit.

- El teatre conserva la màgia dels seus orígens?
Si posessis qualsevol actor del segle I dC davant d’un escenari i li preguntessis què veu, et diria que estan fent teatre. És a dir, encara que hagin passat 2.000 anys, reconeixeria el teatre.

- La professió d’actor, per més apassionant que sigui, té un component d’inestabilitat laboral (no saps mai si el mes següent tindràs feina, els horaris són complexos, viatges, etc.) que pot resultar incòmode. Com es viu sense poder fer plans a llarg termini?
Cal imposar-se unes rutines. De fet, jo en tinc. És fonamental saber que el principal eix diari és la feina. Tens funció a les 21 h i, a partir d’aquí, organitzes els àpats i el descans. El món de la interpretació és inestable, però avui en dia tot és absolutament inestable, no saps què passarà demà. Això t’impedeix planificar viatges i altres projectes en segons quins moments, però tampoc és tan greu; cal pensar que abans no es viatjava tant, abans no hi havia descans. Hi ha una mena de desubicació. Ara, la gent de la Costa Brava que conec està viatjant contínuament. Sempre poso com a exemple Immanuel Kant, que en tota la seva vida no va sortir ni una sola vegada del seu poble natal, Königsberg. Un pensador que ha deixat un llegat importantíssim en el camp de la filosofia, però que mai va sortir del poble.

- Ha rebut dos premis Goya per La comunidad i El cielo abierto. Fins a quin punt són importants els premis i els guardons?
Són un reconeixement dels altres. Depenent d’on vinguin, són molt agradables. També pot passar que no ho siguin... Per posar-ne un exemple, aquest any no m’agradaria rebre cap premi relacionat amb el PP perquè no estic d’acord amb la seva política, i em resultaria desagradable haver de rebutjar un premi, tot i que estic disposat a fer-ho. És un tema de solidaritat. Hi ha moltíssima gent que ho està passant realment malament i em semblaria molt poc elegant acceptar un premi que vingués d’aquestes persones que estan massacrant la nostra professió de manera sospitosa.


Foto: Josep Maria Rué

- Creu que la interpretació en particular, i la cultura en general, estan sent maltractades?
Sí, absolutament, i a més, amb una arrogància notable. Consideren que nosaltres, els actors, som responsables de dues coses, que, com a ciutadans, teníem tot el dret del món a fer. La primera és estar en contra de la guerra de l’Iraq (cada dia en trèiem un cartell). La segona és el fracàs, només atribuïble al Govern del senyor Aznar, en les eleccions del 2004 després de l’atemptat a Madrid. Un govern no pot permetre que aquestes coses influeixin. És molt sospitós que en vint anys no m’hagin fet mai cap inspecció fiscal i, en canvi, el març passat me’n fessin una.

Crec que s’ha vetat la cultura. Hi ha una indefensió absoluta. Al Govern actual li encanta ficar-se en fangars. No són dialogants, ni receptius. És l’«ordeno i mano». Encara que en aquest país hi ha gent assenyada, fins i tot a les files del PP, els dirigents actuals tenen molt poca cultura i una intel·ligència molt perversa. Hi ha molt sectarisme.

- L’obra Poder absoluto, que ha representat a la sala Villarroel de Barcelona juntament amb Eduard Farel·lo, és justament un thriller polític de Roger Peña que se submergeix en el món de la corrupció i desemmascara la realitat de la vida pública política... 
L’obra està basada en un cas real: el del polític austríac Kurt Waldheim, que després d’haver estat secretari general de les Nacions Unides i president d’Àustria, es va descobrir que havia estat oficial de les SS. Quan l’escàndol es va destapar, es va acabar la seva trajectòria política. L’obra ens porta a l’Àustria dels anys noranta i ens presenta la vida d’un subjecte que s’assembla bastant a Waldheim i el seu enfrontament amb un personatge més jove, un polític d’un parell de generacions posteriors a la seva.

- Quins són els seus projectes més immediats?
Representarem aquesta obra a València i a Madrid. Després, gravarem tres capítols de la sèrie Gran Reserva. Si la tercera temporada funciona bé, se’n gravaran deu capítols més per completar la quarta temporada.

- Com a amant del mar que és, i després de més de cinquanta anys de carrera, pensa retirar-se algun dia en un poblet de la costa o és que un actor no baixa mai dels escenaris?
En realitat, ja m’he retirat algunes temporades a la Costa Brava. Dels trenta-tres als quaranta-quatre vaig estar a la Costa Brava i van ser anys molt feliços. Crec que és bo retirar-se de tant en tant i després tornar. Si el cos aguanta, que cal cuidar-lo, només t’has de retirar definitivament quan la decadència ja és preocupant. 

dissabte, 18 de febrer del 2012

EDUARD DE VICENTE, UN HOME DE PEL·LÍCULA!

Foto: Patrícia Lainz

 
“A l’època del 3D, guanyarà els Oscars una pel·li muda! Em sembla una ironia del destí fantàstica.”

L’Edu de Vicente, com habitualment l’anomenem tots els que el coneixem, sempre té un somriure a punt. Precisament amb aquest somriure el veig venir pel passadís que va des de la redacció d’El Periódico fins a la porta de sortida del rotatiu. Hem de buscar algun lloc per fer l’entrevista. En circumstàncies normals seuríem en una terrasseta a prendre el sol, però les temperatures extremes i el fort vent que agita la ciutat aquest mes de febrer no ens donen cap altra opció que arrecerar-nos en una cafeteria. Aigua amb gas per ell i Trina per mi.

Foto: Patrícia Lainz

Fa més de 25 anys que l’Edu es dedica a comunicar cinema, especialment a la ràdio, el mitjà de comunicació que més li agrada, on ha dirigit els programes “Con el cine en los talones” (Cadena Catalana), “Cine en el cuerpo” (Onda Rambla) i “El Club” (Com Ràdio), i ha col·laborat a “Los musicales de la Cadena Catalana” d’Albert Malla; “La radio de Julia” de Julia Otero; “El matí a 4 bandes” de Toni Marín; “La teva sortida” de Josep Maria Neguillo, i “Eureka!” de Mònica López, entre d’altres. També l’hem vist a la petita pantalla col·laborant en programes com “Les 1.000 i una” de Jordi González, “La columna” de Júlia Otero, “El Club” d’Albert Om, o “Divendres” d’Espartac Peran i Xavi Coral, i dirigint i presentant el programa “Seqüències”, emès a La 2 el 1998. A més, és col·laborador d’El Periódico des del 1990 per a la secció Espectáculos, el suplement Icult i El Dominical, i va ser gerent dels multicines Verdi i de la seva distribuïdora de pel·lícules durant tres anys.

La cafeteria que hem triat és horrorosa, per què negar-ho, però engego la gravadora i aviat deixa de preocupar-me la poca estètica del lloc.   

- Quina és la primera pel·li de què en tens record?
La primera pel·li que recordo haver vist perquè m’ho vaig passar molt bé i que, a més, trobo molt adient per a la meva edat és Scaramouche. És que a mi les pel·lis de capa i espasa sempre m’han encantat! A més, el technicolor, que era un color fins a cert punt irreal, era ideal per a musicals i per a pel·lícules d’aventures perquè li donava un toc de fantasia més enllà del que la mateixa història ja t’estava explicant.

Foto: Patrícia Lainz

- Ara ja no se’n fan de pel·lícules de mosqueters....
Es fan d’una altra manera, serien els Piratas del Caribe. Perquè Los tres mosqueteros que han fet darrerament és amb efectes especials! I hi ha un zeppel·lin! És gairebé ciència ficció!

- I la teva passió pel cinema neix arran de les pel·lícules d’espadatxins?
Una de les coses que tinc guardades “como oro en paño” per a l’Adrià, el meu fill, és una col·lecció de Las joyas literarias juveniles, que són uns còmics que sortien als anys 70 i que, en 30 planes, resumien grans obres de la literatura, clàssics de la novel·la d’aventures. Era fantàstic per als nens perquè t’introduïa al món d’aquests grans clàssics i això podia donar-te peu a que, el dia de demà, volguessis llegir-te la novel·la o veure la pel·lícula. I aquest tipus d’aventures que jo llegia als còmics és el que després em trobava a les pel·lícules de capa i espasa.

Foto: Patrícia Lainz

- I la decisió de dedicar-t'hi personalment?
De fet, les circumstàncies m’hi van portar. Sempre es diu que els crítics de cinema són directors frustrats, però aquest no és el meu cas. En tot cas jo seria un actor frustrat. De petit estava al centre catòlic de Gràcia, a un agrupament escolta, i allà hi havia un grup que feia teatre i em van agafar per fer una obra. Em va agradar tant això del teatre que amb el temps vaig voler dedicar-m’hi professionalment. Aleshores em vaig apuntar a les proves d’accés de l’Institut del Teatre amb la intenció de fer la carrera professional i ser actor. Amb tanta mala sort que aquell any havien estrenat la sèrie de televisió Fama i hi va haver un boom d’inscrits a les proves, que van ser absolutament salvatges. Jo no sé si era dels millors o era dels pitjors, però em vaig sentir una mica indignat, i no perquè no m’agafessin, sinó perquè hi havia persones que, des del meu humil punt de vista, eren terribles i les van agafar. A més, jo em vaig preparar un monòleg que ja havia fet al teatre de l’obra La pau retorna a Atenes, de Rodolf Sirera, i creia que com a monòleg era potent. A més, durant els quinze dies que duraven les proves, anaves interpretant el text davant dels professors perquè hi fessin els comentaris pertinents i et corregissin, però en el meu cas no deien res. Aleshores, quan va arribar el moment i em van dir que no m’agafaven, ja estàvem a principis de setembre! Fixa’t si sóc tonto, que una companya del grup de teatre em va dir, abans de fer les proves, que ella coneixia molt a una de les professores i que si volia entrar s’oferia a parlar-li de mi, i jo li vaig dir que no, perquè no volia entrar per “enxufe” i, després de veure com funcionava tot, m’he quedat amb el dubte de si realment no vaig entrar perquè no tingués dots escèniques o no. En fi, la qüestió és que em vaig apuntar a Periodisme. Exclusivament per un motiu: era l’única carrera que tenia una assignatura de cinema. I la tenia a tercer. I jo no vaig arribar mai a fer tercer! Però vaig parlar amb el professor perquè em deixés anar d’oient a aquestes classes. A Periodisme em vaig desenganyar molt, bàsicament perquè gairebé tots els professors que donaven classes eren acadèmics que no havien trepitjat mai els mitjans.

- I vas començar a treballar de seguida...
Sí, de fet vaig anar enviant currículums des del moment en què em vaig matricular a la Facultat, i quan feia segon em van contractar a Radio Espanya (després Cadena Catalana), a esports, amb José Luís Fernández Abajo. Els horaris de feina eren complicats de compaginar amb les classes i, tot i que vaig intentar canviar de grups, no va ser possible. Aleshores vaig pensar que estudiar podria fer-ho més endavant però que la feina la tenia en aquell moment i no la volia perdre.  

Foto: Patrícia Lainz

- Quan vas fer el salt dels esports al cinema i et vas convertir en crític?
Jo crec que no et fas crític de cinema, sinó que te’n fan. No s’estudia. Un crític de cinema és una persona que ha vist moltes pel·lícules, que ha llegit molt i que té una mínima cultura de cinema. La meva teoria és que et fan crític de cinema, et posen l’etiqueta. De fet, des del primer moment jo volia que em diguessin periodista cinematogràfic, perquè a mi això de ‘criticar’ com que no m’entusiasma... El que m’agrada és parlar de cinema. I recordo perfectament la primera vegada que vaig parlar de cinema a la ràdio. Era quan s’anava a estrenar Blade Runner i el Fernandisco, que era amic meu, em va proposar d’anar a parlar de la pel·li. Pensa que estem parlant d’una època èpica en què no hi havia internet! Havies de comprar revistes estrangeres i estar molt a l’aguait de tot el que anava sortint. Fa més de vint anys que faig les pel·lis de la TV a El Periódico i recordo que, abans, cada vegada que anava a l’estranger em comprava els llibres del Leonard Maltin per tenir les fitxes de totes les pel·lis. Ara no, ara vas a l’IMDB i hi poses el títol i llestos. S’ha perdut tota la màgia, era una època molt més heroica, molt més divertida, en el fons. Jo sempre poso el mateix exemple, El acorazado Potemkin era una "virguería" de pel·lícula perquè hi havia centernars de plans en 15 minuts. Ara això és el pròleg de Dos policías rebeldes. És molt fàcil de fer.  

- I després d’aquesta estrena com a periodista cinematogràfic amb Blade Runner, què?
El primer que vaig fer més o menys fix va ser una col·laboració amb l’Albert Castillón a un programa que es deia “Los musicales de la Cadena Catalana”, d’Albert Malla, on hi fèiem, per entendre’ns, un espai de varietats.  El Castillón portava més aviat la part de “cotilleos” i jo m’encarregava de les seccions de cultura, i especialment de cinema. Aquella col·laboració va tenir un èxit brutal i ens vam passar estius i estius fent “bolos” per Catalunya. Aleshores jo tenia 22 anys, duia unes ulleres de pasta horribles i tenia un complex de lleig espantós. Però venien les noies i em demanaven autògrafs! Va ser una experiència que em va canviar veritablement la vida. I a partir d’aquí sempre he intentat fer programes de ràdio sobre cinema, que és, sense cap mena de dubte, el que més m’agrada.

- Quina és la teva pel·li preferida?
Uf... És que en són 300.000!

Foto: Patrícia Lainz

- I si una pel·li t’agrada molt, la tornes a mirar una i una altra vegada?
Sí, quan tinc temps. De fet, tinc ganes de jubilar-me perquè últimament veig tanta merda... Sempre que tinc un moment aprofito per veure les pel·lis que m’agraden. Per exemple, fa uns dies vaig recuperar la trilogia de Regreso al futuro. És que m’ho passo infinitament millor que no pas amb el que veig ara!


- Sí? Ha perdut qualitat el cinema en els darrers anys?
Sí. (Pensa) Sí, sí, sí.

- Per què?
El problema ve de dalt. Avui en dia el cinema no s’arrisca. I com que no s’arrisca... Mira, l’altre dia em van demanar que comentés el cinema que s’estrenarà al 2012. Vaig estar mirant el que vindrà i és literalment depriment. El 80% són pel·lícules amb un número al darrera, segones i terceres i quartes parts o bé remakes.

- Volen assegurar la taquilla.
Sí, i van sobre segur.

- Justament fa uns dies, el ministre José Ignacio Wert va dir que els ajuts per al cinema es reduiran dràsticament i que no podran superar els beneficis en taquilla.
El que ha passat és que hi ha hagut molts casos d’estafadors. El més recent i que ha sortit a la llum és el de l’amo del Casablanca, que agafava els extres de les pel·lícules de la distribuïdora de DVD Criterion, que són xulíssims, i en feia una pel·li que rebia les mateixes subvencions i els mateixos ajuts que qualsevol altra. Una cosa és que tu facis una pel·lícula amb tot l’amor i et surti malament, i una altra de molt diferent és estafar el personal i les administracions.  

- Quan dius que el cinema ha perdut molt et refereixes al dels EEUU?
Bàsicament al dels Estats Units però aquí tampoc et pensis,eh? Aquí el que s’està fent són, en molts casos i llevat d’algunes excepcions, capítols pilot de sèries protagonitzats per actors molt coneguts sortits de les sèries de TV. Tot és el mateix: no s’arrisca. Afortunadament, en aquest país encara queden artistes amb ganes de fer coses. Fixa’t en el Daniel Monzón. Ha fet diverses pel·lícules molt estimables, però cap d’elles havia funcionat per motius aliens a la mateixa pel·lícula: perquè no s’havia fet una bona inversió en publicitat, perquè el cartell tirava enrere, per moltes coses... Però quan va fer Celda 211, a més a més que era la millor pel·li de totes les que havia fet, es va trobar amb un patrocini de Tele5 que va apostar-hi molt fort i, entre Sálvame i Sálvame, veies a Lluís Tosar. El primer que ha de passar és que les televisions, que financen en gran part moltes pel·lícules, apostin per elles.


Foto: Patrícia Lainz

- TV3 es vanagloria d’apostar per la indústria del cinema...
Sí, però no s’ha de vendre indústria: s’han de vendre pel·lícules, pel·lícules. Ostres, si s’estrena Pa negre, doncs “matxaca” la gent perquè vagi a veure Pa negre al cinema. No després. És l’única manera que la taquilla vagi bé. Hem d’aprendre dels francesos, que quan estrenen qualsevol pel·lícula, per dolenta que sigui, com és francesa, tots els diaris obren amb això. Aquí estrenem Salvador i sembla que ens faci vergonya. Excepte un Almodóvar, un Amenábar i quatre casos concrets, no cuidem el nostre el cinema.

- Ara que s'acosta la cerimònia dels Oscars, t'atreveixes a pronosticar guanyadors?
I tant, guanyarà The artist. Sí. Estan entusiasmats. Fins i tot sembla que no se n’adonin que no és americana... I no és americana pel que et deia, ningú a EEUU tindria nassos de fer una pel·li així. A l’època del 3D, guanyarà una pel·li muda! Em sembla una ironia del destí fantàstica. The artist s’endurà l’estatueta a millor pel·lícula, i molt probablement a millor director, perquè tot i que també podria ser per a Scorsese, jo aposto per Michel Hazanavicius. Crec que l’Oscar a millor actor també serà per The artist, però podria ser per a George Clooney. I el més sorprenent que et puc dir és que el premi més cantat de la cerimònia d’aquest any sembla ser que possiblement no se l’endurà la favorita. Estem parlant de Meryl Streep i La dama de hierro, però darrerament està guanyant molts punts Viola Davis, la protagonista de Criadas y señoras. Pensa que entre d’altres coses va guanyar els premis del sindicat d’actors i tots els seus membres formen part del jurat dels Oscars. Pel que fa als secundaris, el masculí és segur que sortirà Christopher Plummer per Beginners. Has de tenir en compte que aquest home era el protagonista de Sonrisas y lágrimas, no han passat anys, eh?! La secundària serà gairebé segur per Octavia Spencer, la que fa el pastís a Criadas y señoras, i qui hagi vist la pel·li es recordarà del pastís. La pel·lícula estrangera, tot i que sempre és el premi més difícil de preveure, sembla ser que serà per La separación, una pel·lícula iraniana, perquè ha guanyat tots els premis previs. I, tot i que Chico y Rita no està mal col·locada per guanyar l’Oscar a millor pel·lícula d’animació, sembla ser que la favorita és Rango, que a mi, d’altra banda, no m’agrada gaire. De tot això que t’he dit, com a molt, m’equivocaré d’un parell.

- Ja ho sé! Que ens coneixem, Edu!
(Riem) Perquè jo les previsions les faig amb molta feina al darrera. Des que surten les nominacions vaig mirant i vaig veient com fluctuen unes i altres. Miro tota l’evolució. Fins fa dues setmanes, Meryl Streep guanyava l’Oscar segur. I ara, en canvi, hi ha dubtes. També podria passar que repuntés, tot dóna moltes voltes. Per exemple, enguany, és gairebé impossible que Glenn Close guanyi.

Foto: Patrícia Lainz

- I, dels que estan nominats, tu a qui donaries els premis?
Home, jo crec que pel que fa a millor actriu, per l’any en sí, no tant per la interpretació, li donaria a la Jessica Chastain perquè, a banda de fer-ho bé, està en tres dels grans llargmetratges de l’any: La deuda (que és una cinta poc vista però molt bona, d’espionatge), El árbol de la vida i Criadas y señoras. Tot i que reconec que Meryl Streep està brutal, brutal. I pel que fa a l’actor... el George Clooney està bé perquè canvia una mica de registre, però potser apostaria per Michael Fassbender, que és l’actor de moda d’enguany, que ha estat a Un método pel·ligroso, de David Cronenberg, i a dues o tres pel·lis més. Actualment el podem veure en cartell a Shame. Ha fet uns quants treballs i tots força correctes.

- I pel que fa a la millor pel·lícula, li donaries a The Artist?
No. Tot i que m’ho vaig passar molt bé mirant-la, eh? Em vaig divertir molt, m’ho vaig passar teta! Però trobo que és una pel·liculeta, un mix, és Cantando bajo la lluvia més Ha nacido una estrella... i no té cap tipus d’originalitat. Per mi, la favorita d’aquest any és una que ja va estar nominada l’any passat com a pel·lícula estrangera i no va guanyar: Incendios, de Denise Villeneueve. És canadenca i és la que més m’ha impressionat.

- I què té d’especial?
És una pel·li basada en una obra teatral, i jo no ho sabia perquè procuro entrar al cinema sabent-ne com menys coses millor, perquè em sorprengui. I quan vaig veure als títols de crèdit que estava basada en una obra de teatre vaig al·lucinar, no ho semblava en cap moment! Justament ara, a finals de febrer, es fa la versió teatral a Catalunya, al Romea, em sembla, amb la Clara Segura de protagonista. Jo, personalment, per la semblança física i el tipus de personatge, hi veia més la Laia Marull, però penso que la Clara Segura pot guanyar tots els premis amb aquest personatge perquè és un paper brutal i crec que, en comptes d’assemblar-se a la protagonista, la Clara pot fer una versió molt a l’estil ‘Anna Magniani’. T’explico una mica: és molt dura. Una dona es mor i quan el notari llegeix el testament als fills, que no tenien gaire bona relació amb ella, els dóna una carta per al seu pare, que ells creien que era mort, i una altra per al seu germà, i no sabien que tenien un germà. A partir d’aquí la filla se’n va al Líban i comença a investigar i a descobrir la vida de la seva mare. Com a reclam publicitari us diré que, atenció, la pel·li té el final més sorprenent que he vist al cinema des de El sexto sentido. “Ahí queda eso!”. (Riu) Però si hagués de premiar una que estigui nominada enguany, jo sense cap mena de dubte i malgrat el que digui tothom, em quedo amb El árbol de la vida.


-Per què hi ha hagut opinions tan dispars amb El árbol de la vida?
Està molt clar. Una de les coses que mou la indústria del cinema és l’avarícia. Es queixen de la pirateria però seria molt fàcil d’acabar amb tot això si no volguessin fer tots els diners el primer cap de setmana. Treure el DVD al cap d’un mes i aquesta voracitat del negoci fa que tu entris a internet i et trobis en Blue Ray pel·lis que s’estrenaran d’aquí a tres mesos. És de tontos i propi de mentalitats que només pensen en fer diners, estrenar El árbol de la vida a un Cinesa Diagonal, al costat de l’última pel·lícula de Sylvester Stallone. No! Aquest film s’ha d’exhibir única i exclusivament als Verdi, als Renoir, a aquests tipus de sales. En canvi, si la poses en un multicines, la gent veu el cartell i pensa “mira, l’última de Brad Pitt” i, és clar, es troben amb un producte que no té res a veure amb el que ells pensaven que seria la pel·lícula i s’emprenyen. Jo puc entendre que hi hagi gent que no l’entengui. No hi ha diàlegs, durant tres quarts d’hora no passa res. És una pel·li suïcida però em sembla prodigiosa i d’una bellesa extraordinària. Les altres millors de l’any, per mi són  Midnight in Paris, que em sembla un ‘divertimento’ fantàstic; Pequeñas mentiras sin importancia, que és una comèdia coral francesa de grans actors, i Melancolía, perquè malgrat que Lars von Trier sigui un imbècil rematat, és una gran pel·lícula. I de les espanyoles, Chico y Rita, que és una preciositat.


- Ara que ets pare, quina pel·li no voldràs que es perdi?
De moment està “pillat” només amb l’Shrek. Es queda hiptonitzat. El que tinc clar és que farà un màster d’Spielberg, perquè és el cinema d’aventures que jo he mamat. Jo penso que Piratas del Caribe no li arriba ni a la sola de les sabates a l’Indiana Jones. I el meu somni és dur-lo al Phenomena, que és una iniciativa fantàstica que es fa al cinema Urgell un parell de vegades al mes i que s’ha convertit en un èxit. Es tracta d’una sessió doble que comença a les 20h, on es projecten pel·lis dels 80 en versió original subtitulada, amb el “pantallón” dels Urgell, amb NODOs i coses d’aquestes, i el que tinc ganes és de portar a l’Adrià a que vegi per primera vegada, per exemple, ET i Regreso al futuro. És que seria una passada!

Foto: Patrícia Lainz

Apago la gravadora perquè fa gairebé una hora que parlem i li dic a l’Edu que ja hem acabat. “Ja està, ja no m’has de preguntar res més?”. De preguntes en podria fer centenars, però després em tocarà retallar i no sabré com fer-m’ho perquè tot em semblarà imprescindible.




dissabte, 7 de gener del 2012

TXABI FRANQUESA: “L’humor crea vincles. Els teus amics ho són en tant que tenen el mateix codi humorístic que tu.”


Hem quedat a casa seva. Fa poc temps que s’hi ha mudat i quan arribo al pis està penjant un quadre a la paret. L’estil de la seva llar és fidel al seu caràcter: hi domina la sobrietat del blanc i l’espai és diàfan i lluminós. El punt de contrast el trobem a la cuina, negra, i al terra, que és de fusta. Tot està meticulosament endreçat i escrupolosament net, i el caliu l’aconsegueix amb alguns mobles heretats i comprats a brocanters. Al Txabi li encanta viatjar, però quan té temps no té diners, i quan disposa dels diners, aleshores, no té temps. Diu que no és de riure fàcil, però jo ho poso en dubte. Riu i somriu molt més del que es pensa. No suporta la gent mal educada ni les persones que criden, segurament perquè ell és molt respectuós. Una de les coses que li fan més por és la malaltia, no tant la pròpia com l’aliena, la de les persones que estima. Em proposa de fer l’entrevista a la terrassa –és un amant de l’aire lliure– i em demana permís per anar pintant un bust femení mentre respon a les preguntes. Em confessa que pintar el relaxa. No m’hi puc negar.

Agafa el bust, pintura blanca i pinzell, protegeix la taula amb un cartró i es posa un davantal per no embrutar-se.

Ell comença a pintar i jo disparo la primera pregunta. Com i quan vas decidir que et dedicaries a fer riure al personal?
Penso que al final tot ha estat involuntari... No crec que res del que m’ha sortit bé hagi estat premeditat perquè, quan hi penso, les coses surten malament. (Riu). Em va venir donat una mica per les circumstàncies, vaig començar a treballar al gremi del turisme i allí hi vaig veure un sinfín de possibilitats. Vaig adonar-me que el que la gent vol, al final, és entretenir-se. Quan un fa vacances, a banda de relaxar-se –que també, però per això ja hi els SPA, que són la cosa més avorrida del món– el que necessites és entretenir-te. Aleshores, vaig començar a muntar espectacles per diferents col·lectius de diverses nacionalitats i havia de fer-me entendre en molts idiomes que desconeixia, cosa que m’obligava a fotre-li molta jeta i a fer un tipus de show molt gestual.
Com et prepares els espectacles?
Els bolos no els preparo! (Riu). Bé, de fet, és clar que preparo un show en concret, però només si requereix d'un format determinat. Si tinc llibertat a l'hora d'actuar, deixo l’espectacle obert. Ho defineixo d’una manera molt informàtica: és com si al cap hi tinguessis moltes carpetes windows, amb diferent informació de coses que has anat pensant, que et venen al cap, que has anat anotant... I el dia que t’agafen les ganes de treballar –que acostuma a passar poques vegades t’asseus i et poses a escriure-ho tot. Després veus si fan gràcia.
T’han de fer gràcia a tu?
(Pensa) A veure, m’han de fer riure o almenys han de ser ocurrents, perquè jo sóc un paio que no tinc el riure fàcil. No hi ha gaires coses que em facin riure i això m’emprenya, perquè no sóc de regalar-me, precisament. M'agrada que el riure sigui sincer i improvisat. Home, ric més amb la gent del carrer que amb shows humorístics. La meva principal referència i font d'inspiració és la gent del carrer. Valoro molt a qui tracta de fer riure, però el que em passa és que ara ho analitzo tot més. Ho observo atentament i penso: “Ostres, que cabró! Com ha arribat fins aquí, aquest? Què bo!”, però no sóc gens escandalós a l'hora de riure. Em fan molta gràcia, sobretot, els nens i els avis. Deu ser un cercle tancat. Són els més honestos, no menteixen mai! Els borratxos, malgrat el què digui el refrany, em resulten pesats... Jo crec que tinc bon beure. Potser no aguditzo, però tampoc carrego.
No desconnectes mai?
Veient un espectacle he aconseguit desconnectar alguna vegada però, és clar, per norma general, el que faig és analitzar. Sense voler-ho.
Et succeeix el mateix quan vas pel carrer? En tot hi veus material per a un gag?
No, em passa una mica que en la vida quotidiana no sóc gens xafarder i, a més, acostumo a anar amb moto, cosa que m’aïlla de la resta del món, viatjo amb els meus pensaments i no participo del que passa al meu voltant. A Madrid, en canvi, sí acostumo a bellugar-me en metro, tot i que per a mi el metro és el més semblant a l’infern.
Sí? Per què?
El metro em sembla horrorós, no m’agrada, jo sempre dic que ja tindrem temps d’estar sota terra. A mi m’agrada l’aire lliure. De fet, ara hem sortit a la terrassa perquè jo necessito veure el cel, el sol... Quan escric, ho he de fer sempre amb llum natural, si no, no puc. Reconec que sóc una mica perepunyetes...

La mania del metro no li coneixia. La resta no em sorprenen.
Quines altres manies tens?
Em molesten molt els crits.
El soroll?
El soroll em molesta, però encara m’emprenya més la gent que fa soroll. Si està tronant, doncs està tronant, i llestos. Però la gent que provoca soroll em treu de polleguera. La brutícia i el desordre també em generen angoixa, em fan estar incòmode. No podria viure ni treballar a un lloc brut i desendreçat. Tampoc suporto els horaris, treballar amb horari d’oficina, per a mi, és el més semblant a estar a la Model. Sóc molt maniàtic també amb les olors. En el cas de les dones jo em deixo guiar molt per les olors. Si una dona fa bona olor però és massa forta, em molesta igual que si fes mala olor. M’agrada que la dona faci olor d’ella mateixa.

El Txabi em pregunta quin acabat m’agrada més per al bust. Decidim per unanimitat que el deixarem amb els traços de les pinzellades marcades, sense polir.
I reprenent el tema de com prepares els espectacles...
Sí... El que faig una vegada tinc els gags escrits, és provar-los. Ara podria tenir una idea que crec que és bona i provar-la amb tu, en fred, sense avisar-te, aleshores analitzaria la teva reacció. Si et fa gràcia, després ho provaré amb una altra persona. Si veig que a aquesta altra persona també li fa gràcia, aleshores penso: “això és material”. I sobre aquest material el que toca és treballar-hi per fer que no només sigui bo, sinó que sigui realment bo.
Trobo que una de les virtuts dels monologuistes és que passeu fàcilment d’un tema a un altre, encara que aparentment no tinguin res a veure.
Els còmics hem après a anar derivant un tema cap a un altre. Ho he contrastat amb altres companys i això d’enllaçar els temes, que abans ens preocupava més, ara no ens amoïna tant. Per exemple, tu estàs parlant d’avions i vols obrir un tema de iaies, doncs fas anar la iaia a l’avió. És tan senzill com això. Al final, el que interessa és que el que diguis tingui un contingut i, sobretot, que faci gràcia, no?  
Com definiries el teu tipus d’humor?
A mi no m’interessa tant l’humor protesta o la crítica política com les situacions surrealistes, divertides...Tot i que jo sóc dels que penso que s’ha de riure de tot. Sóc capaç fins i tot de riure de les tragèdies, perquè crec que és l’única manera d’assimilar-les. Sobretot les pròpies. A mi, per exemple, m’agrada molt parlar de la mort. D’allò que ens fa por és precisament del que ens hem de riure. Fixa’t quants acudits es fan de la crisi, com aquell que diu que “tinc un nen apadrinat a l’Àfrica i m’està enviant diners ell a mi”, saps? I potser estàs explicant aquest acudit sabent que els teus germans no tenen feina... Però, és clar, pitjor seria lamentar-se, no? Saber-te riure d’alguna cosa que et fa mal, demostra que ets prou intel·ligent com per vèncer allò. De fet, per a mi, l’humor és l’armadura del cavaller, és la meva defensa. Per exemple, en una discussió de trànsit, què prefereixes? Arribar als insults desagradables o faltar al respecte amb humor? Amb el sarcasme i la ironia, que són elements humorístics, pots fer molt de mal. El Wyoming o el Buenafuente són especialistes en això.


Aprofita els avantatges de les noves tecnologies però no n’és esclau. No agafa l’iPhone fins que no hem acabat l’entrevista.

A banda de Godoy, que sempre l’anomenes, quins referents tens?
Godoy va ser el primer que em va impulsar a fer el què faig perquè és el primer que jo vaig veure al teatre amb aquest format i em vaig quedar molt impactat. Però és que n’hi ha moltíssims! I no cal mirar gent gaire més gran, tinc referents humorístics contemporanis, de gent de la meva quinta que potser han començat una mica abans que jo i m’han donat l’empenta. També m’ha marcat el Capri, que recordo que el veia quan era petit i que feia unes dissertacions molt fines. Jo he comprovat una cosa, i és que l’humor, si t’hi fixes, crea vincles. En un grup de gent, tindràs més afinitat amb les persones que tinguin el mateix sentit de l’humor que tu, amb les que riguis de les mateixes coses i vagis en la mateixa línia de comentaris. Els teus amics ho són en tant que tenen el mateix codi humorístic que tu.
L’humor és terapèutic?
Totalment. Ara el tema dels monòlegs està funcionant com mai perquè la gent el que necessita és riure per alleugerir el dolor. Els mateixos espectadors t’ho diuen: “durante dos horas me he olvidado de todo”. No es tracta d’una moda sinó d’una necessitat.
En qualsevol cas, hi ha molts monologuistes... Aquesta competència crea rivalitats?
No ho sé, perquè per salut mental, tot i que tinc molts companys de professió als quals no només admiro sinó que estimo, procuro no barrejar-me excessivament amb el gremi. Bàsicament perquè hi ha gent que no viu l’ofici de la mateixa manera que jo. De fet, tinc un problema i és que professionalment no tinc massa ego. M’ho prenc amb molta calma. Home, a tots ens agrada agradar, però no necessito ser el centre del món ni ser admirat. I hi ha companys de professió que potser sí... Jo busco que la gent rigui amb mi i que jo pugui seguir fent riure durant molts anys, vull una carrera de fons i no de velocitat. No vull que la gent m’admiri ni pensi que sóc especial, perquè no ho sóc. Amb el reconeixement dels meus amics i la meva família ja en tinc prou. Perquè ells no pensen que jo sigui superior a ells en res. Normalitat... Perquè, al final, el que més costa de trobar és la normalitat. És curiós, però, gent normal... No hi ha gaire gent normal!
Com no ha d’haver gent normal? I com és la gent, si no és normal?
No... Fixa-t’hi: un està atrapat, un altre histèric, l’altre atacat...
Però jo em considero normal!
Sí. Per això em relaciono amb tu! (Riem)
Què passa si un dia no estàs d’humor i has de fer riure?
Curiosament ho puc fer igual. He comprovat que puc fer humor estant realment malament i de fet em serveix com a teràpia. És per això que em sento un privilegiat. Guanyar-me la vida fent riure als altres i tenir una professió que em serveix per a ser feliç és fantàstic, realment un luxe!
I quan acabes l’espectacle, quedes content?
No em quedo mai satisfet del tot perquè tinc molta capacitat d’autocrítica.
Tens una agenda més aviat atapeïda, amb actuacions fora de casa... Com ho portes?
Quan vas molt de bòlit penses que voldries tenir un temps de calma, però aleshores si estàs un temps més tranquil, notes que et falta aquest ritme. Nosaltres viatgem molt, però ja m’agrada. Tinc la maleta sempre a mig fer. Ja no sé si és que m’agrada o que m’hi he acostumat. El que sí que he après és a trobar el confort de casa en les habitacions d’hotel. El que faig és que viatjo amb tot, que és molt poc.
Què t’emportes?
L’iPad, música, roba per anar a córrer, el banyador per nedar...


Perquè no estigui pendent de la càmera, li dic que llegeixi realment la revista, i opta per consultar la llista de novetats musicals de la Rolling Stone.
Sempre has fet esport, per què? 
És que si no faig esport em bloquejo. Si no fes esport no podria fer humor. A casa meva sempre hem fet molt d’esport i ho necessito, m’allibera.
Com era el Txabi de nen? Eres bon estudiant?
No era gaire bon estudiant perquè sempre estava fent broma. M’escollien de delegat i aquestes coses perquè era bastant líder. De fet, no m’ha costat mai parlar davant de les masses.
I tenir molta gent pendent de tu no et posa nerviós?
No. A mi em faria més por parlar davant de tres persones que davant de tres mil. Home, tens moments tensos, però crec que és més per un tema de responsabilitat i de la situació, que no pas per la gent. Sempre és més fàcil convèncer una massa, que convèncer dues persones.
Aquesta cara de ‘chico malote’ que tens, reflecteix un caràcter més aviat fort?
(Riu) Jo no tinc cara de chico malote! Però sí reconec que tinc caràcter i, tot i que sóc força pacífic, entenc que de vegades es pugui arribar a les mans. És l’últim recurs que utilitzaria, perquè em sembla fatal, i sempre intento emprar l’humor, però si veig que estic discutint amb algú que no té ni capacitat d’entendre... Mira, sempre poso el mateix exemple: si un dia li roben el bolso a la meva àvia i la tiren a terra, t’asseguro que no utilitzaré la fina ironia, ni el sarcasme, ni res d’això. Primer agafo el paio i li foto un gec d’hòsties, després ja veurem. Ui, això ha quedat molt de macarra..., no? (Riu) De tota manera, i ara enllaço un tema amb l’altre, tenir mala llet no està renyit amb el sentit de l’humor. Gila era un malcarat, i el mateix Eugenio era un tipus molt seriot i en canvi era finíssim.
És veritat que costa més fer riure els catalans?
Jo crec que no.
Quan crees els gags, saps quines coses faran més gràcia a homes que a dones?
Sobretot sé el que farà més gràcia als tios (riu). Però hi ha gags que estan pensats per les dones. Ara intento tenir més cura. A mi m’agrada molt l’humor grotesc però amb el temps he anat blanquejant i refinant el meu humor. No és el mateix el que explicava als 24 anys que el que puc explicar ara, als 36. Faig servir més el sarcasme i menys l’humor escatològic. Tot i que jo reconec que em fa gràcia el “caca-culo-pedo-pis” i sé que a moltes dones també, encara que elles diguin que no perquè no queda tan bé riure d’això.
A banda dels escenaris, també t’hem vist al cinema, a la TV, has fet sèries per internet... On estàs més còmode?
Jo? Al llit. (Riu)
Al llit? Però... al llit descansant, o al llit ‘treballant’?
Al llit fent feina! (Riu) No. Seriosament... On em trobo més bé és al teatre, a l’escenari, en directe i amb públic. Perquè el públic et fa de termòmetre. Quan graves alguna cosa, després et veus i canviaries mil coses. Tot i així, m’agrada experimentar amb altres formats, perquè així els conec.
Off the record, li demano si és gaire presumit. Em diu que no, però quan acaba de canviar-se per sortir al carrer, va fins al mirall i es mira. “Ostres, estreno els pantalons avui... Són una mica massa estrets?”, em pregunta.
Quins projectes de futur tens?
Ara he de continuar la gira amb el Club de la Comedia. De fet, està pendent d’emissió el meu monòleg a La Sexta. També hi ha un projecte de televisió, però tampoc hi poso massa pensament perquè com no depèn de mi... I després hi ha una altra cosa de teatre que podria sortir però encara està a l’aire.
Com et veus d’ aquí 15 anys?
Amb canes i calb!
Amb canes o calb? Totes dues coses no poden ser!
Sí, amb canes als lateral i calb pel damunt (riu). De fet, no hi penso. Visc sempre mirant un futur a curt termini.
Pot dir missa, però el Franquesa és tan generós fent riure els altres com rient ell mateix.
Poso el punt i final a l’entrevista. Tal i com jo ja sabia, la conversa ha fluït amb naturalitat i el Txabi, com de costum, m’ha arrencat infinits somriures. Deu ser que tenim el mateix codi humorístic...